La rutina de higiene bucal no acaba con el simple cepillado después de cada comida. Por supuesto, realizar este paso es imprescindible, pero hay ejercicios de limpieza complementarios que no debemos pasar por alto y que no siempre sabemos cómo y con qué frecuencia es preciso hacer, como por ejemplo, el enjuague bucal: ¿cuándo y cómo usarlo?
Este complemento higiénico nos ayuda a eliminar microorganismos y bacterias causantes de la placa dental, además de combatir la halitosis.
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¿El enjuague bucal debe usarse a diario?
Antes de nada, debemos recordar que el enjuague bucal o colutorio no es un sustituto del cepillado de dientes, sino un complemento. Por otro lado, hemos de ser conscientes de que no todos los enjuagues pueden usarse con la misma frecuencia, sino que dependerá de para qué están prescritos.
Esto viene condicionado principalmente por los principios activos del producto: por ejemplo, no es igual un colutorio infantil con bajas cantidades de flúor o clorhexidina, que uno destinado a personas adultas, en el que los niveles de este tipo de componentes son más elevados.
Nuestra recomendación es utilizarlo bajo prescripción del especialista y en términos generales, no usarlo durante más de 10-15 días seguidos, después de los cuales conviene realizar un breve descanso.
¿Qué enjuague bucal es mejor?
A la hora de elegir un enjuague bucal debes tener en cuenta diferentes aspectos:
- Enjuagues con o sin alcohol: si en casa hay niños pequeños o adolescentes que también van a utilizar el enjuague, lo mejor es escogerlo sin alcohol. De la misma manera, si alguno de los miembros de la familia padece alcoholismo, lo mejor evitar productos que contengan este principio.
- Enjuagues para sensibilidad dental: los enjuagues con alcohol pueden resultar irritantes. De modo que si tienes sensibilidad dental, es mejor que optes por colutorios que contengan dosis bajas de alcoholes e ingredientes suaves.
- Enjuagues antiplaca dental: existen colutorios específicos que ayudan a eliminar la placa acumulada en los dientes. En este caso te recomendamos utilizar enjuagues especiales para combatir la placa.
¿El enjuague bucal puede dañar mis dientes?
Lo más recomendable es usar exclusivamente enjuagues prescritos por tu dentista, siguiendo sus instrucciones de uso. Es importante no caer en la tentación del abuso, ya que determinados ingredientes pueden dañar nuestro esmalte de manera permanente. Por ejemplo, el flúor puede provocar fluorosis, mientras que el alcohol, que puede generar una irritación en la mucosa oral, o la clorhexidina, que puede pigmentar los dientes o la lengua.
Cuidado de la boca: limpieza de dientes y encías
El cuidado de la boca es el resultado de varios pasos imprescindibles que hemos de cumplir a diario sobre dientes, encías y lengua.
Lo ideal es realizar un mínimo de dos veces al día el cepillado de dientes y encías y utilizar un raspador lingual específico para la lengua, completar el proceso con hilo dental y utilizar colutorios avalados científicamente, siempre bajo prescripción del especialista. También es recomendable utilizar irrigadores dentales para hacer limpiezas más profundas, especialmente recomendados en el caso de utilizar ortodoncias fijas.
Igual de importante que seguir una rutina diaria de higiene bucal resulta una revisión mínima anual con tu dentista. Recuerda que es una de las muchas gratuidades que incluye el servicio de Servibucal. Busca tu clínica más cercana y solicita asesoramiento profesional.